La definición oficial ™ de sadfishing sería algo así como: “publicar problemas emocionales en internet con el objetivo de despertar compasión o atención”.

La traducción Siwonera es, básicamente, dar pena por interné para pescar likes o que te hagan casito y cositas. Es hacer clickbait con las emociones. Es abrir un live de Instagram mientras tienes un “ataque de ansiedad heavy”. Es subir un BeReal con la cara churretosa de mocos y lágrimas. 

¿Y por qué somos así? - abramos 🔎 investigación psicológica, antropológica y sociológica para comprender…

¿Por qué se empeñan los influs y famosetes en llorar públicamente? 🧐

Respuesta corta: 

Con el boom de la salud mental, estar triste te hace popu.

Respuesta larga:

Hace algún tiempo, lo que molaba en Instagram era llevar una vida con apariencia de #PutoFeliz. Pero los gustos cambian. 

Ahora lo que se lleva es ser #PutoReal: con tus defectos, tus bajonas y tus disgustos. Ya no gustan los influs con vidas perfectas, ahora gusta la peña que tiene ataques de ansiedad en transporte público. Porque #LosInfluencersTambiénLloran.

Si esa pena penita pena es genuina o no… nunca lo sabremos (y, ojocuidao, que tampoco depende de nosotros juzgarlo).

La bajona no perdona: las consecuencias de creerte que Instagram es terapia

• Somos la generación más triste. 🤧 No hace falta ser famoso, influencer ni vender tus problemas emocionales en redes sociales. Nada es tan democrático hoy en día como la ansiedad, el cansancio, la tristeza… o todo a la vez. ¿Va a ser menos real por colgar una story con una canción triste? No, of cors. Pero menuda década de tragicomedia griega se nos está quedando. 
  
  
• Culo veo, culo quiero. 🍑 El problema de que la peña con tantos seguidores practique el sadfishing… es que tienen muchos seguidores. Y el nombre de influencers no es por casualidad: ¿Cuánta gente estará dispuesta a tomar ejemplo y buscar apoyo en redes en vez de entre su gente de confianza? Y eso nos lleva a…
  
  
• Desatender nuestras redes… de la vida real. 🤳 Es digno de estudio que la inmensidad de interné se sienta como un entorno más seguro que tu círculo social de carne y hueso. Lo de quedar con tu colega para contaros vuestros dramas… no siempre tira tanto como escribir un hilo en Twitter.

Aunque no todo iba a ser malo… ¿y si las lágrimas de los famosos tuvieran un lado positivo? 🥲

• Le bajamos los humos a esa obsesión por dar una imagen perfecta de cara a la galería para darle más foco a sentirnos mejor con nosotros mismos.
  
  
• Ya no aspiramos a auto-diagnosticarnos, como si un test rollo Superpop en la página de psicologiaymente pudiera decirte si estás depresivo o tienes estrés postraumático. Que haya tanta gente exponiendo sus movidas, también ayuda a exponer que la salud mental tiene muchísimas caras y no todas tienen por qué ser iguales, pero para todas podemos pedir ayuda.
  
  
• Ok, las redes sociales no están para llenar vacíos, pero sí pueden servirnos para abrir, agrandar y reforzar nuestras redes de apoyo.
     
• Está claro que si queremos que se hable mejor de salud mental, por fuerza, tenemos que hablar más de salud mental.

en fin

Que después de tanto tiempo dejándonos los morros por defender los autocuidados, por dentro y por fuera…. 

No estamos como para que ahora venga nadie a decirle al resto de la peñita dónde puede o no puede llorar, pedir ayuda, abrirse en canal y hablar #SinFiltros de salud mental.

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We do cool right,
Siwon